domingo, 19 de febrero de 2017

CRÓNICA UCAM MURCIA - REAL VALLADOLID (1-3)

PRIMERA PARTE: SE VEÍA QUE SÍ


Cinco minutos bastaron para comprobar que el Pucela sí que tenía chispa. Así como en Montilivi se veía que no, el de la Condomina era uno de esos partidos que se veía que sí. Con Leão más seguro, Míchel y Sergio Marcos incisivos en el último pase, Jose on fire y De Tomás protegiendo balones y marcando, así el Pucela se puso 0-2 en un abrir y cerrar de ojos. Era un partido de un candidato al ascenso directo.

Herrera volvía a algo parecido al rombo que tanto se criticó ante el Girona, aunque en esta ocasión, Sergio Marcos ocupaba la posición de Álex López. El joven manchego se mostró mucho más activo que el gallego en otros partidos, sobre todo en ataque, algo que el Pucela notó enseguida. De esta manera, con un Jose inspiradísimo y De Tomás marcando como titular, el Pucela se iba con 0-2 al descanso y la sensación de que el partido no se escapaba.


SEGUNDA PARTE: UCAM APRIETA PERO NO AHOGA


¿Qué pasó entonces en la segunda parte? Si bien es cierto que nuestro mejor jugador se tuvo que quedar en el banquillo por una sobrecarga, también lo es que el Pucela se aculó perdiendo la posesión del esférico y poniendo en peligro una victoria que se antojaba clara. El UCAM, de la mano de Collantes, tuvo un par de ocasiones para meternos el miedo en el cuerpo pero, al contrario que en primera vuelta, la suerte no les sonrió, y fue Míchel el que hizo el 0-3.

Tuvo que ser Míchel porque un partido más, Jaime "escopeta de feria" Mata, volvió a desperdiciar una clara ocasión, enviando el balón al palo. Sin ánimo de criticarle lo de este chico empieza a ser un expediente X. Al final el UCAM hizo el gol de la honra con un soberbio tanto que dejó ver la relajación defensiva del equipo.


TERCER TIEMPO: SEGUIMOS AHÍ


A pesar de que el equipo (Herrera) volvió a ser un poco cagón, se consiguió una victoria muy necesaria fuera de Zorrilla. Con el ascenso directo prácticamente descartado toca posicionarse dentro de la zona de playoff. Creo que estamos en un momento de la temporada en que la clasificación se va a partir por arriba (7 primeros) y ahí tiene que estar el Real Valladolid. El domingo ante el Lugo hay una gran oportunidad para ello. Seguimos ahí.

Uno a uno:

- Pau Torres (7): Atajó todo lo que le llegó, incluso tuvo una de mérito en un remate en propia puerta.
- Moyano (6): Más colaborador en ataque.
- Alex Pérez: (6): Poco exigido.
- Guitián: (7): Muy elegante como siempre. Me gustaría verle donde Leão otra vez.
- Balbi (4): Sufrió una barbaridad con Collantes. 
- Leão (6): Mejor que otros días pero poco exigido.
- Joan Jordan (5): Muy desaparecido.
- Míchel (8): Un día más decisivo. 
- Sergio Marcos (6): Aportó durante la primera parte y luego desapareció.
- Jose (8): ¿Vuelve el mejor Jose?.
- De Tomás (7): Muy bien haciendo "su" trabajo. 
- Mata (5): En su línea. Ya no sabe qué hacer.
- Ángel (6): Se está convirtiendo en una buena alternativa en ataque, pero me da miedo que no le vea como alternativa a Balbi.
- Álex López (-): No le vino bien la aparición de Sergio Marcos.


Por @AlbertoSelby

lunes, 6 de febrero de 2017

CRÓNICA GIRONA - REAL VALLADOLID (2-1)

SIN RUMBO CON EL ROMBO


Como otras veces he dicho parto de la base de que no tengo mucha idea de tácticas en fútbol, más allá de mis años como socio del Pucela (que ya son unos cuantos). Durante estos años me he acostumbrado a ver un fútbol básico, en el que dos tipos entran por las bandas, centran y el delantero remata. Sin embargo esta temporada en Zorrilla se ha instalado el famoso rombo cuyas pretensiones son muy distintas.  Llevo tiempo notando malestar entre la parroquia pucelana más veterana con ese sistema y cada vez son más las voces que se alzan a favor de un fútbol más "tradicional".

Durante la semana previa al partido de Girona mucho se había hablado de su peligro por bandas y de la forma de pararles. Herrera sin embargo, decidió no adaptarse a las circunstancias e intentar hacer valer su identidad. Hace algunos partidos yo hablaba de esa "identidad Herrera" que ahora le pedimos que cambie. En Montilivi quedó plasmado que en ocasiones hay que adaptarse.

Si confrontamos sensaciones con ocasiones el partido fue totalmente diferente. Viendo el resumen parece que el Pucela pudo merecer algo más, al menos un empate, que hubiera mantenido la ilusión. Sin embargo, en líneas generales el Girona se impuso cuando le interesó y los de Herrera sólo fueron capaces de generar peligro en acciones fugaces.

Y es que el partido se resolvió en varias acciones puntuales como fueron los fallos de Mata y De Tomás o la desgracia de Pau Torrres. Una vez más, las áreas nos pasaban factura. Más allá de eso el equipo volvió a perderse en un rombo que debe servir para mantener la posesión y controlar al rival, y hasta el momento sólo ha hecho que el Pucela navegue sin rumbo.

Tras la derrota parece claro que la lucha por el ascenso directo debe quedar olvidada centrando ya nuestros esfuerzos en afianzar el juego y conseguir llegar en las mejores condiciones al final de temporada, entrando en playoff con las máximas opciones posibles. Aunque viendo lo visto, y en mi opinión personal, creo que en el ascenso con Herrera en 2018. Ahí queda eso.


Uno a uno:

- Pau Torres (5): No le culpo del segundo gol, aunque debió evitar que esa jugada se produjese.
- Moyano (3): Cada día me está decepcionando un poquito más.
- Alex Pérez: (7): Un día más muy seguro.
- Guitián: (6): También muy seguro aunque debió evitar esa cesión a Pau.
- Balbi (4): Empeorando cada día. 
- Leão (6): Poco a poco se está convirtiendo en líbero.
- Joan Jordan (5): Esta vez se quedó en el intento.
- Míchel (5): Al igual que Jordán perdido en el rombo.
- Alex López (3): Todos vemos que no.
- Jose (4): Cuando desaparece, desaparece.
- Mata (3): Sus fallos ya empiezan a ser sangrantes.
- De Tomás (7): Sólo tiene gol. 
- Sergio Marcos (5): Aportó un poquito más que otros días, pero sólo un poco.
- Ángel (5): Sin nadie que le doble o a quien doblar su salida es absurda.


Por @AlbertoSelby