lunes, 29 de abril de 2013

CRÓNICA REAL VALLADOLID – SEVILLA (1-1) por Alberto Cifuentes



NADIE PIENSA EN EL VALLADOLID 




No nos llevemos a engaños, el partido de ayer sólo se siguió con un mínimo interés desde Valladolid y Sevilla. En Mallorca, Granada, La Coruña, Vigo, Pamplona y Zaragoza les era indiferente el resultado que se pudiera dar en Zorilla en la tarde dominical. El Valladolid en estos momentos no es un candidato al descenso. En estos momentos...

Es imposible no echar la vista atrás y recordar la temporada 2008/2009 en la que el Valladolid hizo un horrible tramo final, salvando la categoría agonicamente en el Benito Villamarín. Pues bien, si nos fijamos en los números de aquella temporada, en la jornada 33 el Valladolid empataba en casa y alcanzaba los 41 puntos. Por su parte el equipo que marcaba el descenso era el Sporting con 33, es decir, 8 menos que nosotros. Al final el Sporting acabó por encima del Valladolid, gracias a su victoria en Zorrilla.

Reconozcamoslo, esa situación es tan extraña como que el R. Madrid y el Barcelona remonten en semifinales de Champions a los alemanes.  En condiciones normales, y a pesar del calendario, el Real Valladolid no debería tener problemas para mantenerse un año más en la Primera División. Más aún visto el juego desarrollado por el equipo en el día de ayer. Ahora mismo, el Valladolid debería poder puntuar ante Deportivo, Celta y Mallorca y sellar así la permanencia.

El del Sevilla fue un partido feo en la primera mitad, dejando entrever la falta de objetivos de ambos equipos, aunque en Valladolid se siga afirmando que hay que asegurar la permanencia y en Sevilla sigan pensando en una hipotética clasificación europea. De esta manera, en una buena jugada trenzada entre Óscar y Ebert, éste acabó enviando un pase en profundidad a Javi Guerra que anotó su sexto gol esta temporada. En la celebración, el delantero malagueño se llevó la mano a la oreja queriendo reclamar más apoyo de la afición. Es triste que un jugador que siempre ha recibido el calor de Zorrilla, que perdió la titularidad por su mal juego, tenga que recurrir a esos gestos. Es cierto, que habrá recibido críticas desde determinados sectores, pero en general, es uno de los jugadores más queridos.

En la segunda parte el Sevilla se lanzó a por el empate que consiguió a raiz de un inexistente penalti por mano de Marc Valiente. Unai Emery se había encargado a lo largo de la semana de recordar los errores arbitrales que habían perjudicado a su equipo en los últimos partidos. Undiano Mallenco consiguió, no sólo con el penalti, si no con el conjunto de sus decisiones arbitrales, que Emery no se acuerde de los árbitros esta semana. Teoría de la compensación. Pero, ¿a nosotros quién nos compensa?

El Valladolid detuvo las acometidas sevillistas consiguiendo arrancar un punto, pero quien realmente contuvo al Sevilla fue un sensancional Jaime. Es complicado entender porque Djukic concedió en su día la titularidad a Dani, al igual que es difícil saber porque ahora se la ha dado a Jaime. Probablemente se justifique en que los dos son igual de buenos (o de malos) y ni siquiera el entrenador sabe con cual de ellos acertará.

El mismo caso de la portería se da en otras 3 posiciones en el terreno de juego. Marc Valiente es el único central indiscutible para Djukic. Sereno y Jesús Rueda han rotado sus presencias en el once, independientemente de sanciones y lesiones. La banda izquierda del ataque la han compartido Omar, Bueno y Larsson y en la actualidad ninguno de ellos parece titular indiscutible. De hecho, en mi opinión, el buen partido de Alberto Bueno ante el Sevilla le podría dar la titularidad en el Bernabéu. Y el tercer caso es la punta del ataque. Manucho y Guerra, Guerra y Manucho. Cada uno aporta un juego diferente al equipo y Djukic no parece tener claro con quien de los dos jugar. A mi parecer, el serbio tiene el mismo dilema que en la portería, los dos son igual de buenos (o de malos).

Al final el partido pudo caer de ambos lados. A pesar de que el equipo sevillista fue el que dispuso de más ocasiones, el Valladolid tuvo las más claras en los pies de Ebert y Javi Guerra. El alemán, indispensable en este equipo, estrelló un balón en el larguero tras un buen contragolpe del equipo. Y posteriormente un buen centro de Ebert fue enviado a las nubes incomprensiblemente por Javi Guerra, cuando quizá ya se disponía a dedicar un nuevo gesto a la grada.

La semana que viene viajamos al Bernabéu ¿post-remontada?, donde la derrota parece ser el resultado más lógico. Tiempo para que disfruten jugadores que nunca han jugado allí como Jaime, Rukavina o Javi Guerra. Los equipos de la zona baja, probablemente se despreocupen de este resultado. Esperemos que sigan sin pensar en el Valladolid en lo que resta de temporada.



LO MEJOR:

-         Jaime Jiménez además de carácter está aportando grandes paradas.

-         A la chita callando Álvaro Rubio está completando una temporada magnífica.

-         Ebert decisivo.

-         Óscar en la media punta no tiene nada que ver con Óscar por banda.



LO PEOR:

-         El incomprensible gesto de Javi Guerra en el gol.

-         Undiano Mallenco en su intento por agradar a Emery.

-         Aunque Balenciaga ensaye centros durante toda la semana, no mejorará.



Alineaciones:

Real Valladolid: Dani; Rukavina, Valiente, Rueda, Balenciaga; Álvaro Rubio, Víctor Pérez; Ebert , Óscar, Larsson (Bueno min 65); Guerra

Sevilla: Palop; Coke, Cala (Alberto Navarro min 58), Fazio, Fernando Navarro; Maduro, Hervás (Perotti min 64); Navas, Rakitic, Reyes (Israel Puerto min 87); Negredo

Goles:

1-0 Javi Guerra (min 40)

1-1 Negredo (p) (min 61)

Árbitro:

Undiano Mallenco. Amonestó a Valiente y Ebert por el Real Valladolid y Cala y Hervás por el Sevilla



 por @AlbertoSelby

domingo, 21 de abril de 2013

CRÓNICA GRÁNADA - REAL VALLADOLID (1-1) por Alberto Cifuentes



NUNCA ASPIRAREMOS A MÁS 


jm

“Somos Valladolid”. Miroslav Djukic repitió esta frase una y otra vez durante la temporada pasada. Quizá ni él mismo conozca el amplio significado de esta frase, de hecho solamente lleva 2 años en la ciudad. Bien, pues en el último mes se ha topado con otra de las máximas del “Somos Valladolid”. Este club nunca aspirará a más.

Hasta diciembre el equipo se caracterizaba por un juego vistoso, que conseguía buenos resultados, pero sobre todo por no dar un partido por perdido. Hasta Vigo nadie había ganado fácil al Valladolid, plantando cara a todos sus rivales. Pero cuando el descenso se situaba a más de 10 puntos y el objetivo de la salvación quedaba muy cercano, el equipo se relajó. Se relajó hasta que volvió a ver peligrar la permanencia, entonces ganó al Getafe. Y una vez alejado el descenso, llegó a Granada, y el Valladolid se relajó.

Y es que esa relajación es algo innato al “Somos Valladolid”. Tengo que decir que esta vez Djukic había conseguido ilusionarme. Había llegado a pensar que esta temporada el equipo no se dejaría llevar, que continuaría jugando igual e intentaría ser 10º mejor que 15º. Pero el serbio tampoco lo ha conseguido. Y digo tampoco porque son muchos los antecesores de Djukic que no lo consiguieron. En la historia reciente del club, Kresic, Moré o Mendilibar, cuando tuvieron al Valladolid medio salvado no impidieron que el equipo se dejara llevar con el consiguiente sufrimiento final.

El único que mantuvo la tensión competitiva hasta el final, con la consiguiente recompensa, fue Don Vicente Cantatore. El chileno, con una gran plantilla por cierto, mantuvo al equipo durante la temporada 96-97 en los puestos altos de la clasificación, pero sobre todo consiguió que en la recta final el equipo apretara en cada partido aun habiendo conseguido la ansiada permanencia varias jornadas antes.

Por todos es conocido como acabaron las dos temporadas que completó con el Real Valladolid Mendilibar, uno de los grandes entrenadores de los últimos años. Salvación conseguida en el último encuentro tras haber bajado los brazos en el tramo final de la liga de manera escandalosa. Con Pepe Moré ocurrió más de lo mismo. Buen comienzo de temporada, bajón de juego y resultados y cuando el equipo se veía con el agua al cuello, daba el do de pecho.

Con Djukic pensé que sería diferente. Pero no. Tras un buen inicio de campeonato el equipo se ha diluido sin mostrar ningún tipo de ambición en partidos como el de Deportivo, Levante, Betis, Osasuna o ayer frente al Granada. Da la sensación que el objetivo son los 42 puntos, ni menos, ni más.

En Granada el Valladolid fue un pelele en manos de un equipo muy necesitado de puntos pero que se topó una y otra vez con el reaparecido Jaime. Djukic decidió hacer dos cambios importantes en el mismo partido, Jaime y Guerra sustituían a Dani y Manucho. El portero estuvo espléndido. Él sólo consiguió desesperar a los delanteros granadinos y traer un punto a Valladolid. Jaime y el golazo de Ebert. El alemán no está al nivel de comienzo de temporada, pero sigue siendo decisivo en este equipo. El resto nada, ni aparecieron por Los Cármenes. Ni siquiera Djukic con su planteamiento y sus cambios consiguió que el equipo intentara buscar la victoria. Es más, finalizó el encuentro con un trivote en el centro del campo, buscando cerrar el partido con el empate.

Dicho todo esto, no hay dudas de que la plantilla del Real Valladolid es corta, que ha habido lesiones importantes, que somos un recién ascendido y que Djukic está haciendo maravillas con este equipo. Pero también es cierto que esta temporada el Valladolid ha demostrado que puede jugar bien al fútbol y ser competitivo contra cualquier rival. Es más, equipos como el Rayo Vallecano o el Levante, con unas capacidades similares a las nuestras, se están mostrando mucho más competitivos.

Con 39 puntos estamos prácticamente salvados. Quedan 6 partidos (y 53 segundos). Tenemos que viajar al Bernabeu y Nou Camp, jugar contra tres de los equipos que están luchando por la permanencia y recibir al Sevilla la semana que viene. Esperemos que el equipo no baje los brazos, compita en cada partido, y al final de la temporada nos sintamos orgullosos del Real Valladolid.



LO MEJOR:

-      El punto conseguido tras un mal partido y sobre todo los tres puntos que no consigue el Granada.

-      El partidazo realizado por Jaime.

-      Ebert sigue siendo decisivo.



LO PEOR:

-      Víctor Pérez aguantó los 90 minutos pero lejos de su nivel.

-      La disposición táctica con Óscar en la izquierda no acaba de funcionar.

-      El bajo nivel defensivo mostrado en las últimas jornadas. Ayer se concedieron innumerables ocasiones de gol.

Alineaciones:

Granada: Roberto; Nyom, Diakhaté, Mainz, Siqueira; Torje (Buonanotte min 63), Mikel Rico, Recio, Nolito; Ighalo (Aranda min 77), El Arabi

Real Valladolid: Jaime; Rukavina, Rueda, Valiente, Balenciaga; Ebert (Bueno min 69), Álvaro Rubio, Víctor, Óscar (Sastre min 75); Larsson (Omar min 85), Javi Guerra



Goles:

0-1 Ebert (min 58)

1-1 El Arabi (min 73)

Árbitro:

Delgado Ferreiro. Amonestó a Torje, Recio y Diakhaté por el Granada y a Javi Guerra por el Valladolid.

por @AlbertoSelby