lunes, 18 de junio de 2018

FINAL DE TEMPORADA 2017-2018

RECUERDOS PARA LA FELICIDAD

Creo que la felicidad en la vida no se encuentra en la consecución de los objetivos sino en el recuerdo del esfuerzo que nos costó llegar a conseguirlos. Se podría decir que la temporada 2017-2018 para el Real Valladolid ha sido un éxito con la consecución de un ascenso inesperado para todos, pero yo la felicidad de este logro la encuentro rememorando todo lo bueno y lo malo que hemos vivido. Aquí os dejo lo más destacado desde mi punto de vista:

1. Eterno rival 40 años después. Sin una rivalidad clara tras la desaparición de la UDS este año se intentó retomar con la llegada de la Cultural Leonesa a Segunda División, 40 años después. Demasiada emoción en León con esta rivalidad que derivó en un feo gesto en el partido de la primera vuelta. Luego el Pucela goleó en Copa y venció en Zorrilla y ambos abandonaron la categoría aparcando esa rivalidad, al menos en lo futbolístico.

2. Apuesta real. Cada pretemporada veíamos como varios jugadores del filial entrenaban con el primer equipo y finalmente acababan saliendo del club. Sin embargo, esta temporada la apuesta ha sido real. No creo que el trabajo sea flor de un día sino que es una inversión de hace algunos años que ahora da sus frutos. Y no ha sido una presencia testimonial, Calero, Toni Villa y Anuar han sido decisivos para la consecución del ascenso.

3. Zorrilla. Si bien la lectura podría ser positiva tras los tres últimos llenos que ha presentado el estadio blanquivioleta, quiero quedarme con una fecha: 19-12-2017. Ese día el Pucela vencía al Zaragoza ante 5.559 espectadores. Pocos han sido los partidos en que la grada a alcanzado los 10.000 espectadores, incluso con promociones en las entradas e iniciativas solidarias. Eso sí, el "Fondo Norte 1928" siempre estuvo presente, animando sin parar. Mi enhorabuena para ellos.

4. El día que conseguimos la permanencia. Todos hemos celebrado el ascenso del Pucela pero pocos recordarán que también hemos generado una permanencia, la del Córdoba. Aquel partido, aquel minuto en el que Giannotas fallaba un penalti y Luismi se autoexpulsaba, propiciando una remontada de los cordobeses que daba pistoletazo de salida a su épica salvación. La semana posterior se producía la incendiaría rueda de prensa de Luis César que no le generó consecuencias. Quizá por ello se atrevió a dejar plantada a la prensa local en su despedida. Sus formas no han superado su dotes como entrenador.

5. El hat-trick de Lorca. Llegábamos a la localidad murciana sin posibilidades de fallo y el Lorca se adelantaba en el marcador. Jarro de agua fría y Miranda, Sevilla o Ponferrada en la retina. Pero apareció ÉL. El que ha sostenido al equipo a lo largo de la temporada. El que ha aportado más con su garra que con sus goles (y ya es decir). Su primer hat-trick nos daba una importante victoria para encarar el tramo final. La celebración de sus goles, la piña antes de cada partido o el abrazo de Becerra a Masip, han sido síntomas de la comunión del vestuario. Lo de Rotpuller ha sido la guinda final.

6. Anuar bajando del bus. Último partido de liga y el Pucela depende de sí mismo. La afición se organiza para ir a recibir al equipo. El autobús intenta acceder pero la avalancha blanquivioleta es impresionante. Los jugadores bajan uno a uno entre los vítores de la marabunta. Anuar zarandeado es llevado en volandas (literalmente). Esa cara de satisfacción ya fue una victoria. Y es que a partir de ahí la ciudad ha vivido 15 días de locura blanquivioleta con colas eternas para conseguir una entrada. ¿Tendrá continuidad en julio?

 7. Con un pan bajo el brazo. Se embarcó en esta aventura a la espera de su segundo retoño en Barcelona. Pocos o ninguno confiaban en él y más tras vestirse de Luis César en su primer partido. Sin embargo, supo dar en la tecla tanto en lo futbolístico como en lo anímico para diseñar un equipo prácticamente imparable. Su machada se pone a la altura de la conseguida por Cantatore y su nombre pasa la historia reciente del club junto con los de Djukic y Mendilibar. Me quito el sombrero ante Sergio González.

Cada uno tendréis vuestros recuerdos de esta temporada no los olvidéis porque son los que realmente han forjado este éxito. Enhorabuena a todos. Nos leemos en primera.

¡AUPA PUCELA!

Por @AlbertoSelby

jueves, 14 de junio de 2018

ANÁLISIS NUMANCIA - REAL VALLADOLID (0-3)

EL OTRO BUCLE


Coincidiendo con el primer partido de Sergio titulaba mi crónica "La luz al final del bucle" en la que expresaba mi deseo de que por fin se acabara esta temporada y el bucle absurdo en el que habíamos entrado. Ese bucle que hacía que me subiera y bajara continuamente del carro de la ilusión. Lo que ganábamos en casa lo tirábamos por la borda en partidos desesperantes fuera de Zorrilla. Ese día escribía: ¿Habrá dado Sergio con la tecla? La tecla que convierta al equipo en once Matas, sobre todo por ambición, tanto en casa como fuera. Hoy la respuesta es clara y contundente. 

Y es que este bucle en el que nos encontrábamos inmersos durante esta temporada daba continuidad a otros tantos durante los últimos cinco años en los que el final siempre había sido negativo para nuestros intereses, dando como resultado una grada cada vez menos poblada. Pero el Pucela, de la mano de Sergio, encontró su agujero de gusano para dar un salto hacia otro bucle en el que nos hallamos inmersos y que parece que el sábado tendrá su culminación. Esté sí es el bucle de la ilusión.

Porque seamos sinceros lo que está haciendo Sergio es totalmente indescriptible. Y más si nos centramos en los últimos 15 días. Lo ocurrido desde que el club cuelga el cartel de "no hay billetes" para el partido de Osasuna es historia del Real Valladolid, historia de la buena. Cuatro victorias, cuatro partidos con total solvencia y 360 minutos en los que hemos cantado ocho goles con todas nuestras fuerzas (¿qué tal esas gargantas?)

Oigo/leo a mucha gente decir eso de: "y si hubiera llegado antes Sergio". Creo que los astros se han alineado para que todo nos salga bien. Quizá el equipo se hubiera caído antes, quizá habríamos subido directos como un cohete, pero yo os digo: no cambio este play-off por nada del mundo. Insisto, la fuerza con la que he cantado los últimos ocho goles del Real Valladolid me obliga a buscar intensamente entre mis recuerdos para encontrar algo igual. 

Y a todo esto sólo le queda la guinda. En un Zorrilla a reventar, con gente que está viviendo junto con "los de siempre" este gran momento y que serán bienvenidos a partir de julio a la temporada 18/19. Creo que este posible ascenso supondría un gran espaldarazo en muchos aspectos y, sobre todo, en el social. Vaticino marea blanquivioleta para la historia el domingo y récord de socios la temporada que viene. Aprovechemos esta ola.

Finalizo con mi enhorabuena para los de siempre, los que subís cada domingo a Zorrilla y los que lo sufrís a distancia. Me alegro tantísimo de mirar a mi alrededor y ver vuestras caras, wasaps y tweets durante estos últimos partidos. Os lo merecíais. Enhorabuena.

Pd. Un agradecimiento a toda esa gente que estos días se acuerda de mi y me hace llegar sus mensajes de enhorabuena, es de las cosas que más ilusión me hace.

Por @AlbertoSelby

lunes, 11 de junio de 2018

ANÁLISIS ELIMINATORIA SPORTING DE GIJÓN (2-5)

ORGULLO BLANQUIVIOLETA


Yo que pensaba que la temporada había acabado en abril (y la del filial en noviembre); que pensaba que tendríamos un final soporífero; que no confiaba en ganar tres partidos seguidos; que no pensaba en ganar a Osasuna y meternos en playoff; que me conformaba con un 0-0 en casa ante el Sporting; que llegué al comienzo de la vuelta con más miedo que un nublao al Molinón. Pues hoy estoy eufórico, más orgulloso que nunca de mi Real Valladolid.

Y es que la temporada ya ha sido un éxito. Sólo hay que observar la locura generalizada en torno a los últimos partidos en casa en los que el blanquivioleta ha resplandecido. Qué bonito, por cierto. Más allá de no pasar un final de temporada sin pena ni gloria, Sergio González ha conseguido la machada de plantarse en la final de play-off con una suficiencia insultante. ¿Alguno esperabais la segunda parte del Molinón?

Para los que hemos vivido la goleada del Nastic, la remontada del Numancia o los peregrinajes por los bares de la ciudad para poder ver ridículo tras ridículo fuera de Zorrilla, esto ya es un éxito. Lo que hemos disfrutado en los tres últimos partidos, la pasión con la que hemos cantado los últimos 7 goles, vale mucho más de 20€.

Pero no es el momento de ser conformistas, estamos ante una oportunidad histórica. Porque la racha de la que hablaban Paco Herrera y Luis César ha llegado en el momento justo, aunque sin ellos en el banquillo, quizá ese era el problema. El equipo llega muy justo de efectivos pero con toda la plantilla implicada como nunca y una comunión con la afición total. Ya estamos satisfechos con lo vivido en las últimas semanas pero #QueremosMás.


Uno a uno:

     Todos tenemos claro que la valoración de nuestros jugadores en esta eliminatoria es de sobresaliente por lo que me gustaría hablar de algunos detalles destacables:

- El míster está sabiendo leer a la perfección cada partido sin salir de casa con los cambios ya hechos.

- La mejora de jugadores que no han tenido su mejor año es patente. Moyano ha sido un muro ante Jony (menos en una jugada); Borja se ha vuelto un muro y además dota de tranquilidad al equipo (sólo hay que ver sus celebraciones de los goles); Olivas está rindiendo a un gran nivel, a reseñar su cabalgada por la banda en el segundo gol en el Molinón muestra de confianza.

- Masip está apareciendo en momentos clave. Más allá de los balones aéreos y los penaltis, sus reflejos son vitales.

- La cantera pide paso pero lo hace con calidad. Calero y Toni se están doctorando en este final de temporada. Por favor, hay que reternerlos.

- Mata y Plano están haciendo un temporadón en cuanto a juego, goles y asistencias pero es que su derroche en el campo está por encima del resto.

- La plantilla es una piña y para muestra el abrazo de Becerra a Masip al finalizar el partido del Molinón. Una de las imágenes de la temporada.

Por @AlbertoSelby

domingo, 3 de junio de 2018

REAL VALLADOLID - OSASUNA (2-0)

GRACIAS SERGIO


Así de sencillo: Sergio nos ha regalado un divertido final de temporada y siete días extra para ilusionarnos. La misma ilusión que trajeron a Zorrilla en pretemporada Herrera o Luis César y que se fue diluyendo como un azucarillo con el transcurrir de los partidos. Y es que sin necesidad de inventar el fútbol Sergio ha conseguido meter al Pucela en el playoff y llenar Zorrilla, algo que sólo han conseguido los más grandes de la historia de este club.

Con un par de retoques básicos el Pucela de final de temporada ha mejorado en la faceta defensiva manteniendo la eficacia en ataque. Dando entrada a Nacho, Míchel y Toni, el Pucela parece otro. Olivas y Calero parecen mejores centrales, Borja no pierde tantos balones en la salida de balón, Hervías es un puñal por banda y Plano ha destapado el tarro de las esencias.

He de reconocer que su llegada me dejó frío y más tras el primer partido ante el Sporting, no por el juego si no por la continuidad a las ideas de Luis César. Con tan pocos partidos por delante parecía necesario arriesgar con algo nuevo y el Pucela lo pedía a gritos. Y ese lavado de cara que ha dado Sergio viene marcado sobre todo por la imagen fuera de Zorrilla. Un equipo que parecía muerto cuando jugaba como visitante ha sido capaz de encadenar tres victorias consecutivas.

Ante Osasuna fue más sencillo de lo esperado. Un Pucela desatado en ataque y seguro en defensa no dio prácticamente ninguna oportunidad  a los navarros, que con un jugador menos lo intentaron colgando balones al área, pero esta vez la defensa pucelana se mostró muy segura. La alegría contenida entre los 10.000 de siempre contrastaba con la euforia de los 15.000 "invitados" que serán bienvenidos de nuevo el jueves.

Comentaba en la previa que yo ya me conformaba con el gran ambiente vivido, con el blanquivioleta dando color a los aledaños y lo bonito que es ver un estadio Zorrilla lleno. Ahora que ya estamos en el playoff creo que todos lo vivimos con la tranquilidad de no sabernos favoritos pero tampoco inferiores a ninguno. Si ayer no se le pasaba el ascenso a nadie por la cabeza hoy quien más y quien menos se imagina una celebración en 15 días. Con todo lo que se ha sufrido sólo puedo dar un consejo: tranquilidad y a disfrutar.


Uno a uno:

  - Masip (7): Algo inseguro por arriba salvó el gol del Osasuna con un paradón.
Moyano (6): Muy impreciso al inicio acabó amarrando bien en defensa.
Calero (8): Muy seguro contra un ataque muy complicado.
Olivas (8): A la chita callando está firmando un buen final de temporada.
- Nacho (6): Ya sólo se preocupa de defender.
Borja (6): Bien en su labor.
Míchel (7): En el partido ante el Sporting veremos si es imprescindible. 
Toni (7): Una pena la gran jugada que no supo culminar.
Plano (7): No me canso de alabar su calidad pero también su derroche.
Hervías (8): Vaya chicharro que bien vale un playoff.
Mata (7): Un quebradero de cabeza para una gran defensa. 
Anuar (5): Veremos si es titular el jueves. 
Ontiveros (5): Una pena lo que nos podría haber dado este jugador.
Giannotas (5): Si te vas al corner, vete al corner


Por @AlbertoSelby