lunes, 23 de diciembre de 2013

CRÓNICA DEL RCD ESPANYOL - REAL VALLADOLID (4-2)

LA LOTERÍA NOS SALIÓ A PAGAR


Ni lo jugado, ni la pedrea, ni un 5º, ni por supuesto “el Gordo”. El día del Real Valladolid fue un día habitual de sorteo de Navidad. Comenzó con mucha ilusión por encadenar dos victorias consecutivas y acabar el año con una inyección de moral, y finalizó dando gracias porque “por lo menos tenemos salud”, ya que al finalizar el año nos mantenemos fuera de los puestos de descenso directo.
Una salida fulgurante le bastó al Espanyol para ponerse por delante, merced a un penalti absurdo cometido por Rueda, que no pasa por su mejor momento como blanquivioleta. Un error costaba el primer gol, no se podían cometer más. Los jugadores no lo vieron así y uno tras otro fueron cayendo los goles del lado perico. Eso sí, el Real Valladolid se dejó ver en ataque “algo” tras el 1-0. La vuelta al 11 titular de Óscar González dio un plus en ataque al equipo, que se resintió con la baja de Ebert mediada la primera parte. Con Omar y Bergdich inorperantes en las bandas y Rukavina y Peña muy reservones , Óscar y Javi Guerra no se valían para crear ocasiones.
Y el Espanyol a lo suyo, una buena presión en la salida del balón y a esperar los errores, nada más. Y es que los errores fueron llegando. Rossi perdía un balón en la frontal para que Stuani hiciera el 2-0, con el que se llegaría al descanso, no sin antes errar Óscar la ocasión más clara de la primera parte, en un mano a mano que envió contra los pies de Casilla. Viendo como ha acabado el equipo este año, las esperanzas de revertir la situación son mínimas, pero si hay un clavo ardiendo al que podemos agarrarnos, se llama Óscar González.
La segunda parte debía comenzar con un plus de intensidad por parte de los pucelanos. Nada más lejos de la realidad. El equipo se mostró más blando que nunca en defensa y el Espanyol, atónito ante esa situación, no dudó en aprovecharlo y subir otros dos goles a su marcador. Para ese momento Juan Ignacio ya lo había intentado todo, dando entrada a Víctor Pérez y Larsson. Los últimos minutos sirvieron para que Javi Guerra y Víctor Pérez cogieran confianza de cara al futuro y se pudiera maquillar el resultado de un partido horroroso.
El Real Valladolid tiene ahora mismo ocho jugadores indiscutibles, indispensables e insustituibles, que serán en los que debamos confiar la permanencia: Mariño, Valiente, Rukavina, Rubio, Víctor Pérez, Ebert, Óscar y Guerra. El resto han aportado poco o nada a este equipo por lo que eso mismo se puede esperar de ellos. Veremos que posibilidades nos da el mercado de invierno y sobre todo como finaliza el equipo la primera vuelta en la que restan dos partidos vitales ante dos rivales directísimos como son Betis y Granada.
Finalizamos el año 2013, en el que el balance nos reporta más sensaciones malas que buenas, pero debemos tener claro que el Real Valladolid es un club modesto, cuyo habitat natural es moverse por la cuerda floja existente entre la Primera y Segunda división, si bien se agradecería que nos sonriese uno de esos buenos años que, de vez en cuando, se dejan caer por Zorrilla. Esperemos que sea 2014. Feliz Navidad a todos y próspero año nuevo.


LO MEJOR:
  • Las pinceladas que dejó Óscar González.
  • Los resultados de los rivales hacen que acabemos el año fuera de descenso.


LO PEOR:
  • Múltiples errores defensivos.
  • Nueva lesión del “jugador de cristal”.
  • El equipo sigue sin generar ocasiones.
  • Las buenas sensaciones mostradas ante el Celta se fueron al traste radicalmente.


Alineaciones:
RCD Espanyol: Kiko Casilla; Javi López, Colotto, Héctor Moreno, Fuentes; David López (Raúl Rodríguez, min.57), Víctor Sánchez; Stuani, Sergio García, Simao (Víctor Álvarez, min.75) y Jhon Córdoba (Córdoba, min.59).
Real Valladolid: Mariño; Rukavina, Marc Valiente, Rueda (Larsson, min.64), Peña; Álvaro Rubio (Víctor Pérez, min.55), Rossi; Ebert (Omar, min.20), Óscar, Bergdich y Javi Guerra.

Por @AlbertoSelby

martes, 17 de diciembre de 2013

CRÓNICA DEL REAL VALLADOLID - CELTA DE VIGO (3-0)

TODO ES MÁS FÁCIL CON UN BUEN PORTERO Y UN BUEN “9”


Durante la temporada pasada el equipo jugó bien y consiguió el objetivo varias jornadas antes de acabar la liga, pero quizá, podría haber conseguido algo más de haber dispuesto de más calidad en dos posiciones clave: la portería y el “9”. Este año con la llegada de Diego Mariño y la explosión en Primera de Javi Guerra se ha dado ese salto, que está valiendo puntos para el equipo y ayer nos dio la victoria. Eso sí, ahora hace falta que el resto del equipo responda.
Hay 6.594 personas que un día podrán contar a sus nietos que ellos vivieron un partido en el Nuevo Estadio José Zorrilla un lunes de diciembre a las 22:00. De locos. Y más cuando en la segunda parte empezó a bajar la niebla y por televisión parecía que nos habían codificado la imagen. Al final no fue a más y permitió ver los tres golazos de Javi Guerra. Enhorabuena para los asistentes, os lo merecísteis.
La primera parte fue más de lo mismo en Zorrilla. Excesivo toque del equipo en la parte defensiva, poca profundidad, desaparición de la banda izquierda en ataque, ocasiones claras para el contrario y aparición de un estelar Mariño. El portero gallego volvió a salvar los muebles con dos grandes paradas y un paradón a cabezazo de Charles, de los mejores de esta temporada. Gracias a él nos fuimos al descanso con 0-0, y gracias a “el señor de negro” que anuló un gol a Javi Guerra más que discutible. El resto del equipo lo normal en los últimos partidos: imperial Valiente, lento Rueda, voluntarioso Ebert, “out” Omar y muy profundo en su regreso Rukavina.
La niebla bajó en la segunda parte y debió caer sobre los ojos de Teixeira Vitienes para que expulsara a Charles por lo que lo hizo. A partir de ahí todo fue seguido, la expulsión, la entrada de Óscar y el primer gol de Guerra. Control, giro y zapatazo pegado al palo, todo un “Juan Palomo”. El gol y la expulsión fueron un mazazo para el Celta, que ya no consiguió crear más peligro. Por contra el Valladolid, con un estelar Guerra, redondeó la goleada y el triplete del malagueño. El segundo vino de cabeza tras un centro de Peña y el tercero tras un gran pase de Óscar “el deseado”. Gran noche para Javi Guerra que con sus goles calentó el ambiente de un estadio gélido por las temperaturas.
La derrota ante Osasuna fue muy dolorosa, sobre todo porque no se presumía ningún atisbo de reacción en el equipo. La dinámica seguía siendo negativa y se hacía necesario buscar un punto de inflexión para dar un vuelco a la situación. Habitualmente ese punto lo marca la salida del entrenador. En este caso, creo que la última baza que le queda a JIM para revertir la mala dinámica es el regreso de Óscar González. Esperemos que con el charro el equipo cambié y salga del bache. Quedan tres partidos para acabar la primera vuelta: Espanyol, Betis y Granada, quizá no sea tan descabellado pretender acabar con 20 puntos como dijo el charro.
Los pilares en los que se cimiente la permanencia del equipo deben ser Diego Mariño, Marc Valiente, Álvaro Rubio, Óscar González y Javi Guerra. Una pena que no puedan ser los pilares para un futuro, porque a día de hoy pocos aficionados tienen dudas de que Javi Guerra no continuará en el Real Valladolid la temporada que viene, ¿o sí, Carlos Suárez?


LO MEJOR:
  • La confirmación del gran portero y gran delantero que tiene el Real Valladolid.
  • La vuelta de la mejor versión de la banda derecha: Rukavina-Ebert.
  • Los fieles que aguantaron el frío en el estadio y se fueron con una sonrisa a su casa.
  • La vuelta de Óscar González.
  • Por fin se ganó a un rival directo y muy peligroso.


LO PEOR:
  • El equipo sigue adoleciendo de un extremo izquierdo.
  • El bache que está pasando Jesús Rueda sin tener, además, sustituto.


Alineaciones:
Real Valladolid: Mariño, Rukavina, Rueda, Valiente, Peña, Álvaro Rubio, Rossi, Ebert, Larsson (Bergdich, min. 77), Omar (Óscar, min. 58) y Javi Guerra (Manucho, min 88) .
Celta de Vigo: Yoel; Mallo, Cabral, Fontás (Diego Costas, min. 80), Aurtenetxe; Oubiña, Álex López (Santi Minas, min. 60), Rafinha, Augusto, Charles, Nolito (Orellana, min. 60)  


                                                                                                                         Por @AlbertoSelby

lunes, 11 de noviembre de 2013

CRÓNICA VALENCIA CF – REAL VALLADOLID (2-2) por Alberto Cifuentes

MESTALLA NOS DEBÍA UN PUNTO


7 de Abril de 2013, Valencia. Hernández Hernández comenté la mayor barrabasada de los últimos años en el mundo del fútbol y el Valladolid se vuelve a casa sin el empate merecido. Mestalla deja a deber un punto, que ayer se cobró el equipo de Juan Ignacio. Eso sí, pudieron ser tres.
Mestalla, con representación del “Infierno de Zorrilla” en sus gradas, se presentaba como un campo muy complicado para sacar algo positivo, y mucho más tras la imagen ofrecida hacía una semana en Almería y la sensible baja de Patrick Ebert. Sin embargo, el equipo cambió. De salida Juan Ignacio modificaba su sistema de juego habitual para pasar a jugar con tres hombres en la zona creativa: Rubio, Sastre y Rossi, dejando las bandas para Bergdych y Larsson. Durante la primera parte el equipo se defendió bien sin dar muchas concesiones al Valencia. Un penalti errado por Banega y un paradón de Mariño en un mano a mano con Alcácer fueron las ocasiones más claras del equipo che, sumadas a varios lanzamientos lejanos, donde encontraron su gol. Por contra, en ataque el Real Valladolid se mostraba inoperante, no generando prácticamente ninguna ocasión. Eso sí, Javi Guerra no faltó a su cita con el gol, tran un gran centro de Alcatraz. El año 2013 que está haciendo el malagueño es para enmarcarlo, los aficionados aún seguimos pendientes de su renovación.
La segunda parte el equipo cambió. La táctica ultradefensiva del primer tiempo se vio modificada tras el paso por vestuarios, entendiendo Juan Ignacio que el Valencia era un equipo ganable. Alcatraz, que ya había dado la asistencia del primer gol, anotaba el segundo tras un rechace de la defensa che. Los pucelanos se adelantaban de nuevo en el electrónico haciendo soñar con una victoria importantísima justo antes del parón liguero. Pero no contentos con eso se lanzaron a por más. La indolencia mostrada en Almería se tornó en intensidad en la segunda parte de Mestalla.
Pero justo cuando el Valladolid acariciaba la victoria emergió la figura del partido para el Valencia, Delgado Ferreiro. Más allá de sus decisiones caseras con faltas y tarjetas absurdas que condicionan mucho el juego de un equipo, se cubrió de gloria al no señalar un penalti claro de Ricardo Costa por mano cuando Javi Guerra se disponía a rematar (no busquéis repeticiones, no las hay) y escamoteando una clara falta sobre Alcatraz previa al gol del empate de Feghouli. Mazazo para el equipo de Juan Ignacio que veía como el Valencia empataba de nuevo el partido con 15 minutos por delante, que se preveían eternos. Y lo fueron, para Djukic. La entrada de Valdet “revulsivo” Rama y de el “Zorro” Osorio dieron más mordiente al Real Valladolid, que buscó una sorpresiva victoria y que no llegó por su falta de acierto y por las paradas de Guaita, sobre todo una a un gran disparo de Osorio. Al final empate que sabe a poco en el seno pucelano tras lo visto en la segunda parte.
El Real Valladolid dejó escapar con vida al Valencia de Djukic y al propio entrenador serbio, como queriéndole agradecer sus servicios en los dos últimos años. Veremos como evoluciona el conjunto che, pero todo pinta a que Djukic no acabará la temporada en Valencia.
Mestalla nos dejó a deber un punto la temporada pasada. Este año, con la connivencia de Delgado Ferreiro nos ha dejado a deber tres. Esperemos cobrarnoslos la temporada que viene.
LO MEJOR:
-         Buena primera parte en defensa y buena segunda parte en ataque.
-         Alcatraz se mostró como una buena alternativa al lateral derecho.
-         Javi Guerra continua con su racha.
-         Nuevo parón liguero para recuperar lesionados.

LO PEOR:
-         Nuevamente encajamos dos goles.
-         El buen arranque de Larsson se ha diluido en los dos últimos partidos.
-         Perdemos a Rossi para el partido ante Osasuna.

Alineaciones:
Valencia C.F.: Guaita, Barragán, Ricardo Costa, Mathieu, Bernat, Javi Fuego, Parejo, Pabón, Banega (Canales, m.46), Piatti (Feghouli, m.58) y Paco Alcácer (Hélder Postiga, m.73).
Real Valladolid: Mariño, Alcatraz, Marc Valiente, Rueda, Peña, Álvaro Rubio (Baraja, m.86), Larsson (Osorio, m.81), Sastre, Rossi, Bergdich (Rama, m.77) y Javi Guerra.

por @AlbertoSelby

jueves, 31 de octubre de 2013

CRÓNICA REAL VALLADOLID – REAL SOCIEDAD (2-2) por Alberto Cifuentes

LA FLOR DE JIM


A finales de los 90 dirigía la nave blaugrana un holandes “errante”, que durante un tiempo fue conocido por la capacidad de ganar partidos con más suerte que buen juego. Durante ese tiempo se acuñó el término de “la flor de Van Gaal”. Algo parecido le está pasando a Juan Ignacio en los últimos partidos, aunque en el de ayer un chileno marchitó la flor en el último minuto.
Hubo dos tiempos muy diferenciados, un primero vistoso y con muchas ocasiones de gol, y un segundo tiempo raro y con mucha emoción. El partido empezó con alternativas para uno y otro bando, aunque era la Real Sociedad quien mostraba más calidad en su vanguardia y el Real Valladolid más indecisiones defensivas. De esta manera llegó el 0-1 tras una pérdida de Baraja en el centro del campo, una indecisión de la defensa al tirar el fuera de juego y una “mano blanda” de Mariño al tiro cruzado de Griezmann. A partir de ahí el partido siguió por los mismos derroteros con el Valladolid buscando un juego más directo que en anteriores partidos, que hizo que generara más ocasiones de gol. Larsson, Ebert o Javi Guerra ya pudieron anotar el empate antes del descanso.
En la segunda parte apareció en el terreno de juego Álvaro Rubio, imprescindible en el centro del campo pucelano. Los 10 primeros minutos fueron de asedio a la meta de Bravo. Destacar sobre todo una jugada que comienza Mariño en la portería y tras pasar por todas las líneas acaba con un pase de Ebert desde la izquierda que Guerra envía a las manos de Bravo. Pero de nuevo un error defensivo por parte de Jesús Rueda permitió a nuestra bestia negra de los últimos años, el francés Griezmann, hacer el 0-2.
La ventaja que adquirió la Real Sociedad hundió a los blanquivioletas que intentaron la remontada con más corazón que cabeza. Los donostiarras dispusieron de varias ocasiones para aumentar el marcador, pero su mala puntería y el acierto de Mariño lo impidieron. Juan Ignacio decidió mover el banquillo, Omar sustituyó a Rama y se colocó en la derecha, dejando la banda izquierda para Ebert. Y cuando la afición se resignaba a la derrota, como ya ocurriera en el partido ante el Sevilla, en una jugada aislada Larsson consiguió recortar distancias. A partir de ahí sí, el equipo creyó y embotelló a la Real que no parecía entender lo que estaba pasando. Y en un abrir y cerrar de ojos, el empate. Gran jugada de Javi Guerra y Larsson que de tacón habilitó al malagueño para que hiciera su 6º gol en 11 partidos. Es lo que tienen las rachas.
Pero más allá de conformarse con el empate el Valladolid se lanzó a por la victoria en la que nadie hubiera creído 20 minutos antes. Ebert provocó un penalti por claras manos de Mikel González y, como no, él mismo se dispuso a lanzarlo. Era la gloria para el mejor jugador del equipo. Pero lo falló y el Valladolid se quedó a las puertas de una remontada histórica. Sinceramente, si yo hubiera tenido que elegir un lanzador entre todos los que se encontraban en el campo no lo hubiera dudado. Ebert nos ha dado muchísimos puntos y seguirá haciéndolo, y Zorrilla se lo reconoció coreando su nombre.
Al final sensanción agridulce por esa última jugada, aunque haciendo una valoración en frío, el punto sabe muy bien. El equipo mejoró la imagen del partido del Sevilla, generó más ocasiones y dio un buen espectáculo. Si exceptuamos las dos primeras derrotas, en los siguientes 9 partidos el equipo sólo ha perdido dos ante Atlético de Madrid y Barcelona. En lo que queda de año jugaremos ante Almería, Osasuna, Celta y Espanyol, esa es nuestra liga y ahí es donde tendremos que dar la cara. Esperemos que JIM siga manteniendo su “flor”.

LO MEJOR:
-         La alternativa de un juego más directo promovido por los dos delanteros.
-         La vuelta de Larsson en su mejor versión.
-         La racha goleadora de Javi Guerra.
-         La capacidad de reacción del equipo no dando por perdido ningún partido.

LO PEOR:
-         Si hasta ahora el ataque era el punto débil, en los últimos partidos el aspecto defensivo está flojeando en demasía.
-         Javier Baraja da muestras de verse superado día tras día en el centro del campo.

Alineaciones:
Real Valladolid: Mariño; Rukavina, Valiente, Rueda, Peña; Ebert, Baraja (Rubio, min. 46), Rossi, Rama (Omar, min. 66); Larsson y Guerra (Zubi, min. 87).
Real Sociedad: Claudio Bravo; Carlos Martínez, Cadamuro, Mikel, De la Bella; Bergara, Zurutuza, Prieto; Griezmann (Pardo, min. 77), Vela y Seferovic (Agirretxe, min. 70).

por @AlbertoSelby

sábado, 26 de octubre de 2013

"INTENSIDAD Y ACIERTO", CRÓNICA RAYO VALLECANO – REAL VALLADOLID (0-3) POR ALBERTO CIFUENTES

INTENSIDAD Y ACIERTO


El Real Valladolid fue a Vallecas a ganar. Algo tan sencillo como eso es lo que cambió respecto a anteriores partidos e hizo que consiguiéramos la segunda victoria de la temporada. Más allá de la apuesta por los dos delanteros, de la incorporación de Rama en la banda izquierda o de la presión asfixiante, el Pucela jugó ante el Rayo con muchísima intensidad.
Una de las claves en ese afán con el que salió el equipo fue Manucho. El angoleño es un jugador malo, pero cuando quiere correr, presionar e incordiar se convierte en un dolor de cabeza para las defensas contrarias y hace más sencillo el trabajo de sus compañeros. Ayer no marcó, pero su trabajo incansable desquició a la defensa rayista y generó espacios para Guerra, Ebert y Rama. Está claro lo que quiere Juan Ignacio de esta plantilla, un juego combinativo con Óscar, Guerra, Rubio o Ebert, pero el planteamiento de ayer dejó claro que hay alternativa, que los dos delanteros pueden ser una opción cuando el equipo esté atascado.
Y a esa intensidad que se mostró hay que unirle el acierto de cara al gol. El equipo empezó presionando muy bien y sorprendiendo a los de Jémez, pero alrededor del minuto 20 el Rayo ya había conseguido sacudirse el dominio y comenzó a generar juego. Fueron unos minutos que hicieron generar dudas de nuevo en el equipo pucelano, sin embargo emergió la figura de Ebert. El alemán se sacó un zurriagazo con su pierna mala para clavar el 0-1 en la portería de Rubén. ¿Alguna vez ha marcado un gol que no fuera bonito? Y para ahondar en la herida rayista y gracias a los espacios generados por Manucho, Javi Guerra aprovecho un pase de Rossi para hacer el 0-2 antes del descanso. De esta forma Guerra se coloca al frente de la clasificación de goleadores nacionales con un gran inicio de temporada, que esperemos se vea refrendado con su renovación.
Y qué decir del crack que se encuentra bajo el arco pucelano esta temporada. Diego Mariño apareció ayer como los grandes porteros. El Rayo Vallecano le puso poco a prueba durante la primera parte, pero después de entrar tan poco en juego realizó la parada de la noche en un lanzamiento bombeado de Trashorras que sacó con la punta de los dedos. A partir de ahí desbarató todos los intentos rayistas por acortar distancias en el marcador, incluso con otro paradón de mucho mérito tras recibir una tarascada de su compañero Baraja. Intentaremos no darle mucha importancia al gallego para que no nos oigan en Villarreal y le podamos disfrutar mucho más tiempo.
Y con lo plácido del marcador Juan Ignacio se dio cuenta de que iba a ser una semana muy dura con enfrentamientos ante Real Sociedad y Almería, y comenzó a dar descansos. El primero fue Ebert que dejó su sitio a Larsson. El sueco anotó su primer gol como blanquivioleta en el primer balón que tocaba, que siga la racha. Posteriormente dio descanso a Javi Guerra que lleva un tiempo renqueante y no era cuestión de forzarle. Además Juan Ignacio evitó tener que utilizar a Óscar y dio también unos minutos a Rubio que pareció encontrarse bien.
Con el 0-3 y el planteamiento suicida de Paco Jémez, el Valladolid pudo hacer más goles, pero se volvió con los 3 puntos y una renta importante de cara a posibles empates a final de temporada. La sensación que deja este partido es que si el Real Valladolid quiere, puede. En el debe del equipo queda que ante el Elche y Levante no quiso. Veremos cómo se cierra esta semana que tan bien ha empezado y que podría dar aire y confianza al Real Valladolid y a Juan Ignacio Martínez.
LO MEJOR
-      La intensidad que mostró el equipo desde el primer minuto y el acierto de cara al gol.
-      La aparición estelar de Mariño en los momentos clave.
-      El buen hacer de la defensa que consiguió acabar el partido con la portería a 0.
-      La tranquilidad del marcador permitió jugar con el banquillo de cara a una semana dura de fútbol.

LO PEOR
-      La peor parte se la llevaron Omar y Bergdych que en esta ocasión no contaron para Juan Ignacio.
Alineaciones:
Rayo Vallecano: Rubén; Tito, Gálvez, Arbilla, Mojica; Trashorras, Baena (Larrivey, m.46); Perea (Lass, m.46), Jonathan Viera, Iago Falqué; y Nery Castillo (Bueno, m.62).

Real Valladolid: Mariño; Rukavina, Valiente, Rueda, Peña; Ebert (Larsson, m.46), Baraja (Álvaro Rubio, m.78), Rossi, Rama; Manucho y Javi Guerra (Alcatraz, m.73).

por @AlbertoSelby

martes, 22 de octubre de 2013

CRÓNICA REAL VALLADOLID – SEVILLA (2-2) por Alberto Cifuentes

QUE LOS ÁRBOLES NO NOS IMPIDAN VER EL BOSQUE


El Sevilla mereció ganar, punto.
Si tras ir perdiendo 0-2 durante 81 minutos, consigues remontar un partido hasta empatar y tu parroquia no se va satisfecha a casa, es que algo has hecho mal. Y el Valladolid ayer lo hizo muy mal. Y el Sevilla muy bien. Muy bien hasta que decidió dar un paso atrás, dejar de ejercer la presión a la salida del balón pucelano y buscar el 0-3 en alguna contra. Es cierto que el Sevilla venía con muchas bajas y jugadores tocados, quizá bajas más importantes que las del Real Valladolid, pero Emery supo como jugarle al equipo de Juan Ignacio, algo que ya va siendo habitual entre los técnicos de la Primera División. El técnico pucelano quizá debería replantearse si sacar el balón jugado desde la línea defensiva es la mejor forma de afrontar lo que queda de temporada.
El Sevilla se puso 0-2 enseguida con goles de Bacca, un incordio constante para los centrales pucelanos y de Alberto Moreno, futuro de la selección española. Por contra el Valladolid no intimidó en ningún momento la portería defendida por Beto. Con Omar inoperante en la mediapunta y Javi Guerra renqueante, Bergdych era el único que creaba peligro con sus cabalgadas, y aún así fue el elegido en el descanso para dar entrada a Manucho, pasando a jugar con dos delanteros y con Omar en la izquierda.
Tras el arreón de los 10 primeros minutos, bien aguantado por el Sevilla, el Valladolid volvió a mostrarse inoperativo, colgando balones una y otra vez a Manucho, que no conseguía hacer ningún remate. Omar y Baraja dejaron su sitio en el campo a Rama y Rubio, cuya suplencia aún no se entiende. Rubio puso la pausa necesaria, aunque es cierto que perdió dos balones que pudieron ser vitales, y Rama esa dosis de revulsivo que hace que sea un fantástico suplente. De hecho tenemos tres fantásticos revulsivos para el medio izquierdo: Rama, Omar y Bergdych, ahora nos hace falta encontrar un titular.
Y cuando ya nadie creía en la remontada y comenzaban a atisbarse los primeros pitidos en la grada, tan desquiciada como el equipo, Manucho recortaba de cabeza tras un buen centro de Peña y Ebert empataba en un lanzamiento de falta magistral. Lo que pasó con el alemán tras el gol dejemoslo a la interpretación subjetiva de cada uno. Lo único objetivo del caso es la calidad y entrega de Ebert, por lo que se presenta como el jugador más importante de cara a la búsqueda de la permanencia.
Al final el partido acabó en tablas, injusto resultado a todas luces por lo ofrecido por uno y otro equipo en el terreno de juego. Esperemos que Juan Ignacio esté de acuerdo con esta afirmación y que este empate suponga un punto de reflexión en su discurso futbolístico y podamos ver a un Valladolid mucho más efectivo. Juan Ignacio es el primero que tiene que impedir que los árboles no le dejen ver el bosque.

LO MEJOR:
-         El punto.

LO PEOR:
-         El equipo sigue mostrándose muy romo en ataque, generando muy pocas ocasiones de gol.
-         Juan Ignacio no supo reaccionar al planteamiento de Emery.
-         En determinadas fases del partido se vio a los jugadores y afición excesivamente nerviosos. Estamos en octubre.
-         Parece ser que Álvaro Rubio volvió a acabar tocado.

Alineaciones:
Real Valladolid: Mariño, Rukavina, Rueda, Valiente, Peña, Baraja (Álvaro Rubio, m. 66), Rossi, Ebert, Omar (Rama, m. 66), Bergdich (Manucho, m. 46) y Guerra.
Sevilla: Beto, Beto, Diogo, Cala, Navarro, Pareja, Carriço, Iborra, Alberto Moreno, Jairo (Perotti, m. 78), Vitolo y Bacca (Gameiro, m. 80). 

Por @AlbertoSelby

lunes, 7 de octubre de 2013

CRÓNICA BARCELONA 4 - 1 REAL VALLADOLID


LO IMPOSIBLE


El título de esta crónica estaba predestinado a llevar el nombre de alguna película española. Mi deseo hubiera sido titular “El milagro de JIM Tinto” pero al final se cumplieron las previsiones y puntuar en el Nou Camp se tradujo en “Lo imposible”.

El que pretenda sacar conclusiones de lo ocurrido el sábado en la ciudad condal es porque no ha visto jugar al Barça en los últimos años. La diferencia entre los azulgrana y el resto de equipos es abismal y el Real Valladolid no iba a ser menos. Y aún así se consiguió aguantar 45 minutos. En ese periodo el Valladolid mantuvo una buena presión y generó algunas ocasiones hasta que se adelantó en un corner, de nuevo botado por Ebert y cabeceado por Javi Guerra. Los 3 últimos goles pucelanos han sido a balón parado, quizá el equipo técnico esté ensayando la estrategia. A esto se le sumó un buen trabajo defensivo que abortó las acciones azulgranas, a excepción de un latigazo desde fuera del área de Alexis que puso el empate inmediatamante. Así se llegó al descanso con un meritorio 1-1, pero a sabiendas de que 45 minutos por delante iban a ser muy largos.

Y lo fueron. Más allá de la calidad de los jugadores del Barcelona, más allá de la pegada, del desborde, de la rapidez, la clave del juego azulgrana reside el pase y la recepción. La precisión en cada uno de los pases que realizan ya sean en largo o en corto, y la precisión en la que recepción esos pases, consiguen minar la moral de los contrarios hasta la desesperación. Y con esa precisión lo único que tiene que hacer el Barcelona es pasar y pasar y pasar, a sabiendas de que no les van a robar el balón, porque no hay un mal pase ni una mala recepción. Y en cuanto el contrario intenta robar, en cuanto pierde su posición, el pase se convierte en una asistencia al hueco dejado y gol. Lo que todos conocemos como “la jaula”. Y ante eso no se puede hacer nada.

Y cuando el Valladolid tenía la posesión e intentaba salir con el balón jugado, la precisión no era la misma que la del Barcelona. En cuanto un jugador recepcionaba un pase “regulero” y el control se le iba unos centímetros, ahí estaba una pierna azulgrana. Robo en mediocampo, pase al jugador que está sólo y gol. Así cayeron tres en la segunda parte, que pudieron ser más si el Barça hubiera estado más acertado o el árbitro hubiera visto un penalti claro sobre Neymar, penalti que nos hemos hartado de ver en infinitas repeticiones desde infinitos ángulos, es extraño que no exista ya la cámara “on board Neymar”. Eso sí, a continuación hubo un penalti en el área contraria sobre Omar, pero en este caso parece que se nublaron todas los objetivos del Camp Nou porque no hubo una sola repetición.

El Real Valladolid encara un nuevo parón liguero con 6 puntos en ocho jornadas, mal balance si no tenemos en cuenta los rivales, ya que hasta la fecha nos hemos enfrentado con cinco equipos de los siete primeros clasificados. Podríamos decir que ahora empieza una liga nueva para el Pucela, contra rivales directos, con la recuperación de los lesionados y esperemos que con un entrenador con las ideas más claras. Ahora es cuando hay que dar la cara y de aquí a diciembre podremos hacer una valoración de lo que puede ofrecer este equipo realmente.

LO MEJOR:

-         Buena primera parte del equipo.

-         Javi Guerra sigue en racha. Que no pare.

-         Baraja no está desentonando en el centro del campo.

-         El gol anotado en el Nou Camp hace que el equipo no caiga a puestos de descenso.

-         Parón para recuperar lesionados.



LO PEOR:

-         Muy poca aportación de los tres mediaspuntas: Ebert, Omar y Bergdych.

-         Jornada en la que ganaron muchos rivales directos.



Alineaciones:

F.C. Barcelona: Valdés; Alves, Bartra, Piqué (Busquets, min.78), Adriano; Xavi, Song, Cesc (Iniesta, min.64); Alexis, Neymar y Tello (Pedro, min.73).

Real Valladolid: Mariño; Rukavina, Valiente, Rueda, Rossi; Baraja, Peña, Ebert (Rama, min.70), Bergdich (Alcatraz, min.86); Omar y Javi Guerra (Osorio, min.61)



Goles:

0-1 Javi Guerra

1-1 Alexis

2-1 Xavi

3-1 Alexis

4-1 Neymar

Por @AlbertoSelby