jueves, 27 de junio de 2013

¿POR QUIÉN ESTAMOS EN PRIMERA? por Alberto Cifuentes

¿POR QUIÉN ESTAMOS EN PRIMERA?

Hace ahora 2 años, el Real Valladolid pasaba por una situación más que complicada. Los dueños, ocultos tras Carlos Suárez, mantenían la patata caliente a regañadientes. Un club con una gran deuda y en Segunda división, algo que era augurio de más deuda. Durante los últimos días de Junio de 2011 la afición estaba desencantada por el ascenso frustrado en Elche y más desencantada aún porque no existía un proyecto de futuro, futuro más que desolador.

Desde el club se anunciaba una rueda de prensa el 4 de Julio a la que acudirían altas personalidades de la ciudad con el alcalde a la cabeza. Quien más o quien menos se imaginaba lo peor, desde la salida de los actuales dueños, a la disolución del club. En el momento en que Carlos Suárez
comenzaba su alocución con su típica voz triste, los peores presagios parecía que se iban a cumplir: “El club no marcha en su mejor momento, los dueños no quieren hacerse cargo, por lo tanto........”, la desaparición planeaba en nuestras cabezas, “... por lo tanto, he decidido hacerme con el 58,09% de las acciones del Real Valladolid”. 10 años después de su llegada a la ciudad se convertía en el máximo accionista y cara visible del club.
A partir de ahí, tomó dos decisiones que marcarían el proyecto futuro del club. Por un lado la contratación de Miroslav Djukic como técnico en un proyecto a 3 años, y por otro la contratación de Alberto Marcos como adjunto a la dirección deportiva del club. Dos casi novatos en los cargos para una apuesta de futuro muy arriesgada y a la vista de los resultados, acertada.
Las contrataciones de Djukic y Alberto Marcos generaron muchas dudas durante aquel verano de 2011. Miroslav empezó con buen pie, con ese carácter afable y esas ganas de estar en “todo” se ganó pronto al aficionado. Por su parte Marcos, ha sido todo lo contrario, trabajo en la sombra, silencioso, incluso en las entrevistas que ofrece siempre parece recién levantado de la siesta. Sin embargo, hay que reconocer su gran trabajo al frente de la parcela deportiva.

Las condiciones en las que ha afrontado el club el mercado de fichajes en las últimas temporadas han sido fichajes a coste 0, cesiones o algunas operaciones rocambolescas, pero Marcos ha demostrado moverse muy bien en ese terreno. Bueno, ha demostrado moverse, ya que desde un principio se le ha achacado que la mayoría de los fichajes han sido recomendados por terceros, sin embargo la cabeza visible en este terrero, para lo bueno y para lo malo, es Alberto Marcos.
En estos dos años han sido más los aciertos que los errores teniendo en cuenta los handicaps bajo los que se mueve el Real Valladolid a la hora de fichar. Jugadores, la mayoría de ellos desconocidos y que se han hecho un nombre en nuestra ciudad: Víctor Pérez, Mikel Balenciaga, Dani Hernández, Ebert, Rukavina u Omar Ramos. Todos ellos a coste 0 y en propiedad lo que redunda en beneficios para el club. Asimismo el trabajo de Marcos más allá de nuestras fronteras está siendo excelente. Dados los condicionantes de este club para contratar, se ha decidido abrir las miras a otras ligas europeas que nos aportan jugadores de un nivel parejo al nuestro, con gran capacidad de sacrificio y ya adaptados al futbol europeo. Más allá de que se acierte o se falle, detrás de todos estos jugadores hay un trabajo: Larsson, Valdet Rama, Harbuzi, Rossi o Bergcyich son ejemplos de ello.
Y a ese trabajo hay que sumarle una discrección absoluta indispensable para que fructifiquen esas contrataciones. Hoy en día con la aparición de las redes sociales cada vez es más difícil guardar secreto en una operación, pero el Real Valladolid lo está consiguiendo. Son muchos los rumores que apuntan a unos u otros jugadores, pero cuando todos estamos hablando del interés por Alfaro, Montañés u Oriol Riera el club aparece con Bergdych, un joven francés desconocido para el gran público, como lo eran Ebert o Rukavina.

Y en medio de esta vorágine de nombres y más nombres, el club sigue trabajando para sus aficionados con la presentación de una campaña de socios protagonizada precisamente por ellos, por los socios: “Por tí, estamos de Primera”. Una campaña que es un acierto sobre todo por la bajada de precios en estos tiempos que corren. Realmente, y exceptuando casos muy extremos, el que no se hace socio es porque no quiere. El lema de esta campaña es muy significativo ya que supone un agradecimiento del club hacia sus aficionados más fieles, haciéndoles partícipes de los logros del equipo. Pero quizá no estaría de más que esta afición supiera reconocer el buen trabajo realizado por los responsables del Real Valladolid y sobre todo por Carlos Suárez y Alberto Marcos, que están consiguiendo grandes logros con medios ínfimos. Por ellos, estamos en Primera.
por @AlbertoSelby

lunes, 3 de junio de 2013

CRÓNICA FINAL DE TEMPORADA



SEGUIREMOS SIENDO VALLADOLID 




Finalizó la temporada 2012-2013 con el Real Valladolid en la 14ª posición de la liga y sin haber pasado apuros a lo largo de todo el año. Se podría decir que ha sido una temporada tranquila y también que no pasará a los anales de la historia blanquivioleta. No obstante hay algunos detalles que cabe destacar.

La temporada 2011-2012 finalizó con el ansiado ascenso a Primera división tras un año demasiado largo en el que los jugadores llegaron fundidos al último mes. De esta manera el equipo fue el último en incorporarse a los entrenamientos de pretemporada. Esto hizo que sólo se jugaran 4 partidos veraniegos (con resultados negativos todos ellos) que unido a la situación de Alberto Bueno y Manucho y a la falta de refuerzos en determinadas posiciones, conllevó que el Real Valladolid comenzara la temporada como uno de los principales candidatos al descenso.
Pero más allá de comenzar la temporada con dudas, el Real Valladolid comenzó ganando en Zaragoza y al Levante en Zorrilla. Durante las primeras jornadas el equipo se asentó perfectamente en la categoría destacando sobremanera la banda derecha con dos fichajes a coste 0 muy poco conocidos por la mayoría de los aficionados al fútbol, Rukavina y Ebert. El Serbio, recomendación de Djukic era un seguro en defensa y se incorporaba mucho y muy bien en ataque, entendiéndose a la perfección con la gran estrella del equipo, Patrick Ebert, que además de mostrar una capacidad de entrega inmesa, dejó detalles de su calidad y goles.
El Valladolid se caracterizaba por no dar por perdido ningún partido y luchar contra todos y cada uno de los rivales a los que se enfrentaba. Además, en ocasiones llegaba a mostrar un buen fútbol como en aquella goleada por 6-1 al Rayo Vallecano. También, como prácticamente cada año, tiró por la borda la Copa del Rey, cayendo eliminado en la primera ronda tras un horroroso partido en Sevilla ante el Betis. Estaba claro que con una plantilla tan corta Djukic no quería distracciones más allá de la liga.
El mes de diciembre se presentaba temible con partidos como el del Pizjuan o ante los dos todopoderosos del fútbol español. Sin embargo, la victoria por 1-2 en Sevilla daba confianza al equipo que consiguió plantar cara tanto a Madrid como a Barcelona. Ante el conjunto madrileño llegó la primera lesión de Patrick Ebert que unido a los rumores de su posible salida en el mercado invernal hizo que comenzara la polémica en torno a este jugador.

A estas alturas Dani y Manucho ya les habían quitado el puesto a Jaime y Javi Guerra. El decepcionante comienzo del portero y el delantero del ascenso hizo que Djukic se decantara por el venezolano y el angoleño que respondieron con buenos partidos. Ni siquiera la marcha de Manucho a la Copa de África hizo que perdiera la titularidad a su vuelta. Esta ha sido una de las claves de una temporada en la que se podía haber aspirado a estar más arriba. Las dudas de Djukic en dos puestos tan claves han dejado al descubierto que en ninguna de esas posiciones se disponía de un titular de garantías.
Con el nuevo año llegó la derrota en Vigo en un muy mal partido del equipo y que hizo encender las alarmas. Sin embargo, dos victorias seguidas en Zorrilla ante Mallorca y Zaragoza trajeron de nuevo la tranquilidad. Gracias al buen juego del recuperado Ebert y sobre todo al gran momento de Óscar el equipo se fue alejando poco a poco del descenso. El salmantino ha firmado su mejor temporada en Primera división. Mucho más regular que otros años ha llevado el peso del equipo en todo momento, convirtiéndose además en el máximo goleador del Valladolid. Sin duda ha sido el mejor jugador de la temporada.
Sin embargo, a la tranquilidad deportiva no le seguía la tranquilidad institucional con los rumores sobre la salida de Ebert. Tras la buena temporada que estaba realizando el aleman era normal que le salieran muchas “novias”, sin embargo, lo que no sabíamos es que tendríamos el enemigo en casa, y fue el utilero del club el que acompañó a Ebert a las negociaciones con el Atlético de Madrid. Tuvieron que ser los jugadores y el entrenador los que mediaran para evitar el despido de Óscar. El bajo rendimiento de Ebert en los últimos partidos de temporada y sus “sospechosas” bajas hicieron que parte de la afición desconfiara de su compromiso, pero quizá con su despedida en el partido ante el Celta haya conseguido paliar esa sensación.
El equipo finalmente se acabó salvando tres jornadas antes de finalizar el campeonato y ver la lucha por la permanencia desde la barrera. El mal partido en el Nou Camp, la decepción de la derrota ante el Celta y la goleada en Mallorca hacen que la sensación final sea algo negativa, sin embargo si echamos la vista atrás podemos comprobar que ha sido una plácida temporada que ojalá que se repita en más ocasiones.
La temporada ha finalizado con el anuncio de Djukic de que no cumplirá su último año de contrato con el club. Más allá de que la decisión sea acertada o no, las formas que ha utilizado para comunicarlo oficialmente no han sido las correctas. Contínuas largas a los periodistas citándoles para una u otra rueda de prensa y alusiones a su deseo de tener un proyecto. ¿Que más proyecto buscaba que los 3 años que le firmó Suárez cuando su único mérito en el mundo del fútbol era descender al Hércules a Segunda división? Tenemos que estar muy agradecidos a Miroslav por estos dos buenos años de fútbol, por el ascenso y la permanencia, pero quizá debamos dejar pasar el tiempo para valorar si está entre los mejores entrenadores de la historia reciente del Valladolid, como Cantatore o Mendilibar. Lo que sí que está claro es que tan agradecido debe estar el Valladolid a Djukic, como Djukic al Valladolid. No obstante y venga quien venga, seguiremos siendo Valladolid.

LO MEJOR:

-         La permanencia lograda con mucha holgura.

-         El acierto en los fichajes de Rukavina, Omar o Ebert.

-         La gran temporada de Óscar González.

-         Las renovaciones que asientan la base del futuro (Rueda, Valiente, Rubio u Óscar).

-         La aparición final del mejor Javi Guerra.

-         La cohesión del grupo.

LO PEOR:
-         La falta de ambición para luchar por cotas más altas cuando se ha podido.

-         La polémica que se ha generado alrededor de Patrick Ebert.

-         La indecisión del entrenador en puestos clave como son la portería y el 9 del equipo.

-         Las posibles bajas de cara a la temporada que viene de jugadores importantes como Ebert, Jaime, Balenciaga o Peña.

 Por @AlbertoSelby