ANÁLISIS VALLADOLID - EIBAR (2-0)

DESCOLOCADOS

El titular elegido esta semana no puede estar más lejos del partido hecho por el Real Valladolid y, sobre todo, por Salisu y Joaquín. Evidentemente no es un análisis deportivo sino de la grada y es que vivir los últimos 10 minutos de partido sin tensión es algo raro por estos lares. Personalmente he de decir que estuve en un sinvivir hasta el final, como si un gol del Eibar valiera doble. Lo dicho, la falta de costumbre de un partido tranquilo del Pucela me dejó descolocado.

Ante el Eibar la clave estuvo en las áreas. En la primera parte vimos un Pucela acertado ante la portería rival y a un Masip que detuvo los pocos arreones visitantes. Míchel corroboró un partidazo con un pase medido que Plano puso en bandeja para que Guardiola se reencontrara con el gol. Poco después, una jugada no ensayada (en palabras de Sergio), acabó con el primer gol del mejor del partido, Salisu.

En la segunda parte comprobamos el muro en que se ha convertido la defensa blanquivioleta con la incorporación de Joaquín al medio y el desacierto a la hora de rematar el partido y brindar más tranquilidad a la grada. El Eibar de Mendilibar se lanzó al ataque como un kamikaze y los atacantes pucelanos no supieron cerrar el partido. Aun así, la grada fue una fiesta ovacionando cada uno de los cambios.

Y un día más tuve que pellizcarme. Ya desde el gran ambiente previo, el momentazo del himno o la espectacular animación del fondo, lo que estamos viviendo en torno al Pucela es más que un sueño. La masa social ha crecido de manera espectacular y ahora todo el mundo quiere estar en Zorrilla, aunque sólo unos pocos comprendemos el privilegio que supone esto. Ojalá nos dure muchos años.

Y con 14 puntos en 11 partidos nos dirigimos al partido del Camp Nou, más amañado que nunca. El Barcelona saldrá con todo (y descansadito) y Sergio rote todo lo posible para afrontar el verdadero choque importante el domingo que viene. Se entiende que no habrá ningún altercado ya que en estos tres días se habrá resuelto todo el conflicto en esa ciudad. La lógica dice que saldremos goleados, espero que no se os atragante.

Uno a uno:

- Masip (8): Dos grandes intervenciones a lanzamientos de Pedro León que pudieron desequilibrar la balanza. Sigue en gran estado de forma.
- Moyano (7): La ovación de la grada fue un reconocimiento a su labor en el campo. Cerró como pudo a Orellana y prácticamente no asomó por el área rival. A lo suyo.

- Salisu (10): Inconmensurable. Todo lo hizo bien, incluso en la amarilla que le enseñaron había sacado el balón limpio. Si ya marca se merece el 10.
- Kiko Olivas (7): Muy pocas complicaciones. Es el complemento ideal para Salisu como ya lo fue para Calero.
- Nacho (6): Sufrió bastante con Pedro León en la primera parte, pero aun así no se amilanó para incorporarse y asistir en el segundo gol.
- Plano (8): Otro gran partido que pudo culminar con el 3-0 pero se precipitó en el mano a mano. Si a su gran calidad le suma tal derroche, estamos ante un jugador top para el Pucela.
- Joaquín (9): Su aparición en el 11 ha puesto el ladrillo que le faltaba al muro pucelano. Corta balones por todos lados y gana todos los duelos de cabeza. Imprescindible.
- Míchel (8): Parece que con Joaquín al lado está más liberado y da su mejor versión. Otro gran partido con un gran pase en el primer gol.
- Toni (6): Es un quiero y no puedo. Intenta hacer de las suyas pero no está fino. En todo caso es importante para mantener alerta a la defensa rival.
- Enes Ünal (6): Curiosa la ovación que le brindó el público cuando se retiró. Otro partido de brega y lucha, siendo un quebradero de cabeza para la defensa rival. Dejó una gran asistencia a Plano y poco más con el balón.
- Guardiola (8): Se reencontró con el gol y lo dio todo hasta el minuto 90. Su mejor versión como suele decir Sergio.

- De Frutos (6): Sorpresa su salida y sus minutos. Sólo le faltó elegir la mejor opción, pero parece que Sergio puede contar con él.
- Anuar (6): Lo que nos tiene acostumbrados, derroche absoluto, pero algo más torpe con el balón.
- Waldo (-): Pocos minutos y cierto cabreo. A seguir luchando por un puesto, no queda otra.

Por @AlbertoSelby