lunes, 19 de agosto de 2019

ANÁLISIS REAL BETIS - REAL VALLADOLID (1-2)

DIGESTIVO PARA TODOS

Viendo la convocatoria algo se intuía. Al anunciar el 11 inicial, ese doble lateral derecho nos hacía barruntar algo. Finalmente, el desarrollo del partido en el Villamarín cumplió con mis presagios: la temporada pasada tiene pinta de repetirse. Yo ya estoy preparando todo tipo de digestivos, porque si se repite va a ser peor que un plato de morcilla de Burgos con alioli. 

Durante este verano lo he comentado en varias ocasiones, la temporada 2018-2019 ha sido la que más he sufrido en mis 26 años como abonado. Un sinvivir continuo que acabó con la milagrosa permanencia de Sergio y los suyos, para nuestro regocijo y para disgusto de nuestros cardiólogos. 

Este verano, ya sin una deuda tan amplia, se esperaba un salto de calidad, que hiciera que el equipo no pasara tantos apuros. Sandro y Pedro Porro ejemplifican a la perfección ese salto de calidad que deben refrendar otros como Javi Sánchez o de Frutos. Sin embargo, el que comanda la nave blanquivioleta, ha empezado la temporada como acabó la anterior: vieja guardia y a exprimir recursos. No digo que sea malo, pero ya iría por el tercer milagro consecutivo y no nos quedaría más remedio que llamar al Papa Francisco.

Siete jugadores del once inicial habían conseguido el ascenso hace dos temporadas, pero también habían vagado por Segunda durante gran parte de esa temporada, por lo que un cambio en esa vieja guardia se hacía indispensable. El partido de Moyano y Antoñito ejemplifica perfectamente ese deseo: muchas ganas, mucha garra pero muy poco efectivos, y esto Primera División y además, esta temporada, ya hay alternativa. 

Mal haría el club, el míster y el entorno en pensar que con lo del Villamarín ya sería suficiente, máxime con la lesión de Sandro. Hace falta un sustituto de garantías para Míchel; gente como Porro, Waldo o Toni tienen que tener minutos; y hay que ir al Bernabéu a por lo que nos dejamos la temporada pasada. Yo, en todo caso, voy preparando el digestivo, porque como la temporada pasada se repita, mi estómago lo va a pasar peor que mi corazón. Digestivo para todos.

Uno a uno:
Masip (6): Poco exigido a lo largo de todo el partido, pero estuvo seguro cuando el Betis llegó. Un par de malos despejes no le hicieron dudar.
Moyano (4): Tello le martirizó y cuando se encontró con el balón en ataque, sus centros eran un poema.
- Salisu (8): Muy bien nivel, sobre todo secando a Borja Iglesias.
Kiko Olivas (7): Volvió en la misma buena forma que terminó la temporada pasada.Nacho (5): Se entendió mejor con Waldo, pero desperdició toda la primera parte.
- Antoñito (4): Una pena que no hubiera otro jugador en esa banda, el Betis lo hubiera pagado.Alcaraz (5): Me preocupó no ver al mismo Alcaraz que el año pasado.
Míchel (6): Luces y sombras. Buen trabajo defensivo y poco criterio a la hora de mover al equipo.
 Plano (6): Un partido de suspenso arreglado con el golazo de la victoria.
- Sandro (7): 10 minutos que le sirvieron para dejar su sello y la jugada que desequilibró el partido.
Sergi Guardiola (8): Los focos estaban en Sandro y él se erigió como la estrella.


- Ünal (6): Se movió y protegió muchos balones pero tuvo poca incidencia en el partido.
- Waldo (7): Crea mucho peligro de la nada. Debe jugar.
Anuar (6): Dio mucho oxígeno, algo que el equipo necesitaba.

Por @AlbertoSelby

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